No se fue jamás. Cada recuerdo, mi recuerdo del metro, ligera yo en la maniana en Boadilla. Soy una desertora de mi pasado. Pero allí duermo, tiemblo. Duerme un temblor, duerme un suenio que despierta de día.
Dan las seis del café que se enfría por este polvo lunar, esta nieve que me trae el presente, mi pasión, mi suenio y temblor.
Y ahora soy reina, soy duenia del tiempo tejido por este cristal. Se abre el telón que desafía mi comienzo, y yo vuelvo a bailar, vuelvo a bailar, vuelvo y vuelvo, quiero reinar, no por un segundo, sino por una vida.
Y si no me voy?
Perspectivas.
"El proyecto es usted". Dice el Doctor Ríos.
El proyecto no tiene plan, ni responsables, todo a la vez, pero todo se tiene que hacer. El proyecto lo dejaré sin ver su fin, lo dejaré y él seguirá.
Será un recuerdo. Un desertor? Un error?
Y por qué lo quiero dejar? Por qué me quiero dejar? abandonar? no consigo acabar, no consigo acabarme. Ese camino se apagará.
Porque quiero volver a reinar. No reino en mí. No soy libre.
Quiero ser responsable de mi propio camino, que nadie me diga, dónde ni cuándo.
Quiero ser responsable de mi propio camino, que nadie me diga, dónde ni cuándo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario